MECANISMOS DE AUTOAYUDA

(Fragmento del relato "La fe Mueve Montañas") “Luego regresamos con mi hijo a Huacho para traer el resto de nuestras cosas y enseres, para implementar nuestro nuevo hogar, alquilamos un camioncito tipo furgón, cargamos nuestras cosas, y nos dirigimos al poblado de Churín por una carretera afirmada, un poco agreste, tipo serpentín, en el camino hubo un acontecimiento asombroso, para quienes estuvimos presentes y logramos ver el espectáculo, cuando estábamos a unos minutos de llegar a Churín, en la parte alta de los cerros que rodean al pequeño pueblo, siendo aproximadamente la una de la madrugada, el chofer, mi hijo y yo, fuimos testigos de excepción y observamos en el cielo como se movían objetos voladores no identificados (platillos de colores zigzagueando de un lado para otro), eran cuatro objetos voladores, predominaban los colores azul, rojo y verde, aparecían y desaparecían en un ritmo constante, tan grande fue nuestra curiosidad y asombro que el conductor del

Siempre propendemos vivir cada día mejor, para algunos es difícil hacer cambios en su vida, pero si queremos acercarnos al ideal de la tranquilidad y paz interior, se trata en realidad de una cuestión de hábito.